
El anuncio que hizo Ecopetrol sobre apostarles a los yacimientos no convencionales (YNC), no es solo para aumentar las reservas de crudo de Colombia; sino para darle un reimpulso a la actividad de hidrocarburos en el Magdalena Medio, y más a la de Barrancabermeja.
El viernes, en el foro de YNC que se realizó en la capital petrolera del país, la discusión no se centró en si estos proyectos son ambientalmente sostenibles, sino en cómo la estrategia de la petrolera colombiana, con la inversión en la modernización de la refinería y la producción del petróleo de esquisto, le devolvería la dinámica hidrocarburífera de años anteriores.
Un vocero de Ecopetrol le reveló a Portafolio que la fórmula busca reimpulsar la industria, la cual ha decrecido en los últimos años. Y esto será a través de la operación de los YNC, en donde las reservas se estiman en cerca de 5.000 millones de barriles.
“Antes, la región del Magdalena medio era la que aportaba más en la producción petrolera del país, mientras que departamentos como Meta y Casanare estaban relegados a un segundo lugar; pero hoy la realidad es que los departamentos que hacen parte de esta cuenca están por debajo en operación y producción con respecto a los dos de los Llanos Orientales”, precisó la fuente.
A la fecha, y desde hace ocho años, se han invertido poco más de US$4.000 millones en las obras de repotenciación de la refinería. Los trabajos han consistido en la modernización de la infraestructura para procesar combustibles con el nivel de calidad exigido a nivel mundial; así mismo, en la adecuación, con tecnología de punta, del Centro de Control Maestro y la del área de Servicios Maestros.
Estimaciones de la petrolera indican que el costo total del proyecto son US$8.000 millones.
FUENTE PORTAFOLIOCO