
No se salvó nada. Ni útiles, ni plata de la merienda, ni mucho menos un celular de gama media que llevaba un estudiante de 11° grado del colegio San Marcos, de El Llanito, el pasado martes.
Se dirigía tranquilamente a una jornada de clases, sin sospechar que desde una moto dos hombres lo vigilaban, a la vez que lo convertían en su objetivo de ese día.
“Me tiró el bolso con fuerza, me lo quitó a la brava, me amenazó con un arma de fuego y también me quitó un celular y hasta la plata que llevaba para la merienda”, dijo el joven denunciante.
Lo más preocupante del caso es que esta agresión no fue la única que ocurrió ese día y no es la primera que deja mal parados a los estudiantes del colegio San Marcos, que brinda educación a cerca de 800 alumnos.
De hecho, ese mismo día una estudiante también fue víctima de los amigos de lo ajeno, y se sospecha que podría tratarse de los mismos autores del hurto al estudiante de undécimo grado.
Ante esta situación, voceros de los estudiantes e incluso varios padres de familia han señalado que existe una preocupación generalizada, ya que no se sabe quién podrá ser la próxima víctima y a qué precio.
Por ello, han pedido a las autoridades municipales que tomen cartas en el asunto e implementen medidas de seguridad junto con la Policía, para garantizar la seguridad y protección del estudiantado.
Comité de convivencia
Ante la situación denunciada en las últimas horas por la comunidad educativa del colegio San Marcos, representantes de la Administración Municipal se pronunciaron y anunciaron que se hará una evaluación inmediata del caso.
“Activaremos un comité de convivencia escolar para abordar y analizar el tema.
Habría personas en motos que roban a los estudiantes y también a la comunidad, es un tema de seguridad que vamos a hablar con la Secretaría de Gobierno para mirar qué tipo de acciones podemos implementar”, dijo el secretario de Educación de Barrancabermeja, Óscar Jaramillo.
VANGUARDIA